¡Cuida de tu salud mamaria! No esperes más, únete a las mujeres y hombres comprometidos con la prevención y detección temprana del cáncer de mama.
El Dr. Willer Orlando Castellar Lengua, ginecoobstetra líder y gestor de la Ruta de la Mujer en Salud Cafam, nos recuerda la importancia de actuar y hacernos responsables de la salud mamaria, instando a las mujeres y hombres a no postergar la prevención y detección temprana del cáncer de mama.
¿Qué es el cáncer de mama?
El cáncer de mama es la proliferación anormal y desordenada de células mamarias malignas que conduce al crecimiento descontrolado de un tumor dentro de la mama, el cual tiene la capacidad de invadir a otros órganos. Se considera la primera causa de enfermedad y muerte por cáncer entre las mujeres colombianas. También se presenta en menor número en hombres.
Cambios en los senos a lo largo de la vida que no son cancerosos
La mayoría de las mujeres tienen cambios en los senos en momentos diferentes de sus vidas.
Antes o durante los períodos menstruales, sus senos pueden sentirse inflamados, sensibles o dolorosos. Usted puede sentir también uno o varios bultos en este tiempo debido al exceso de líquido en sus senos. Su proveedor de servicios médicos puede pedirle que regrese a consulta un día diferente de su período menstrual para ver si cambió el bulto.
Durante el embarazo, sus senos pueden sentirse con bultos. Esto sucede de ordinario porque las glándulas que producen la leche están aumentando y están creciendo. Durante la lactancia, usted puede presentar una afección llamada mastitis. Esto sucede cuando se bloquea un conducto de leche. La mastitis causa que el seno se vea rojo y se sienta con bultos, caliente y sensible. Puede ser causada por una infección y a menudo se trata con antibióticos. Algunas veces es necesario drenar el conducto.
Al acercarse a la menopausia, las concentraciones de hormonas cambian. Esto puede hacer que sus senos se sientan sensibles, aun cuando usted no esté teniendo su período menstrual. Sus senos pueden sentirse con más bultos que antes.
Si toma hormonas (como terapia hormonal para la menopausia, píldoras anticonceptivas o inyecciones) sus senos pueden volverse más densos. Esto puede dificultar la interpretación de la mamografía. Asegúrese de hacer saber a su proveedor de servicios médicos si usted está tomando hormonas.
Después de la menopausia, sus concentraciones de hormonas bajan. Puede ser que deje de tener bultos, dolor o secreciones del pezón que acostumbraba a tener.
¿Cuáles son los síntomas del cáncer de mama?
Los signos de advertencia del cáncer de mama pueden ser distintos en cada persona. Algunas personas no tienen ningún tipo de signos o síntomas.
Algunas señales de advertencia del cáncer de mama son:
Un bulto nuevo en la mama o la axila (debajo del brazo).
Aumento del grosor o hinchazón de una parte de la mama.
Irritación o hundimientos en la piel de la mama.
Enrojecimiento o descamación en la zona del pezón o la mama.
Hundimiento del pezón o dolor en esa zona.
Secreción del pezón, que no sea leche, incluso de sangre.
Cualquier cambio en el tamaño o la forma de la mama.
Dolor en cualquier parte de la mama.
Ten en cuenta que estos signos de advertencia pueden darse con otras afecciones que no son cáncer. Si tiene algún signo o síntoma, consulta al médico de inmediato. ¿Cuáles son los factores de riesgo del cáncer de mama? Los principales factores que influyen en el riesgo de una persona incluyen ser mujer y hacerse mayor. La mayoría de los cánceres de mama se detectan en mujeres de 50 años o más. Algunas mujeres tienen cáncer de mama, aunque no tengan ningún otro factor de riesgo conocido. Tener un factor de riesgo no significa que la persona tendrá la enfermedad, y no todos los factores de riesgo tienen el mismo efecto. La mayoría de las mujeres tienen algunos factores de riesgo, pero la mayoría de las mujeres no tienen cáncer de mama. Factores de riesgo que no pueden cambiar
Hacerse mayor. El riesgo de cáncer de mama aumenta con la edad. La mayoría de los cánceres de mama se diagnostica después de los 50 años.
Mutaciones genéticas. Las mujeres que han heredado cambios (mutaciones) heredados en ciertos genes, tales como en el BRCA1 y el BRCA2, tienen mayor riesgo de presentar cáncer de mama y de ovario.
Historial reproductivo. El comienzo de la menstruación antes de los 12 años y de la menopausia después de los 55 años de edad exponen a las mujeres a hormonas por más tiempo, lo cual aumenta el riesgo de cáncer de mama.
Tener mamas densas. Las mamas densas, a veces, puede hacer difícil la detección de tumores en una mamografía. Las mujeres con mamas densas tienen más probabilidades de tener cáncer de mama.
Antecedentes personales de cáncer de mama o ciertas enfermedades de las mamas que no son cancerosas. Las mujeres que han tenido cáncer de mama tienen mayores probabilidades de tener esta enfermedad por segunda vez. Algunas enfermedades de las mamas que no son cancerosas, como la hiperplasia ductal atípica o el carcinoma lobulillar in situ, están asociadas a un mayor riesgo de tener cáncer de mama.
Antecedentes familiares de cáncer de mama o cáncer de ovario. El riesgo de una mujer de tener cáncer de mama es mayor si su madre, una hermana o una hija (parientes de primer grado) o varios integrantes de la familia por el lado paterno o materno han tenido cáncer de mama o cáncer de ovario. Tener un pariente de primer grado de sexo masculino con cáncer de mama también aumenta el riesgo para la mujer.
Tratamientos previos con radioterapia. Las mujeres que han recibido radioterapia en el pecho o las mamas antes de los 30 años tienen un riesgo mayor de presentar cáncer de mama más adelante en la vida.
Exposición al medicamento dietilestilbestrol (DES). DES se administró a algunas mujeres embarazadas en los Estados Unidos entre los años 1940 y 1971 para prevenir el aborto espontáneo. Las mujeres que tomaron DES están en mayor riesgo de tener cáncer de mama. Las mujeres cuyas madres tomaron DES cuando estaban embarazadas de ellas también podrían estar en mayor riesgo de tener cáncer de mama.
No mantenerse físicamente activa. Las mujeres que no se mantienen físicamente activas tienen un mayor riesgo de tener cáncer de mama.
Tener sobrepeso u obesidad después de la menopausia. Las mujeres mayores que tienen sobrepeso u obesidad tienen mayor riesgo de tener cáncer de mama que las que tienen un peso saludable.
Tomar hormonas. Algunas formas de terapia de remplazo hormonal (aquellas que incluyen tanto estrógeno como progesterona) que se toman durante la menopausia pueden aumentar el riesgo de cáncer de mama si se toman por más de cinco años. Ciertos anticonceptivos orales (píldoras anticonceptivas) aumentan el riesgo de cáncer de mama también.
Historial reproductivo. Quedar embarazada por primera vez después de los 30 años de edad, no amamantando y nunca tener un embarazo que llegue a término puede aumentar el riesgo de cáncer de mama.
Tomar alcohol. Algunos estudios muestran que el riesgo de la mujer de tener cáncer de mama aumenta cuanto mayor sea la cantidad de alcohol que tome.
Las investigaciones sugieren que otros factores, tales como el tabaquismo, la exposición a sustancias químicas que pueden causar cáncer y cambios en otras hormonas debido al trabajar en el turno de la noche, también pueden aumentar el riesgo de cáncer de mama. ¿Qué puedo hacer para reducir el riesgo de cáncer de mama?
Mantén un peso saludable.
Evita el consumo de bebidas alcohólicas, si lo haces, toma con moderación.
Si estas en periodo de lactancia, amamanta a tu hijo.
Si tienes antecedentes familiares de cáncer de mama o cambios heredados en sus genes BRCA1 y BRCA2, habla con tu médico acerca de otras maneras de reducir su riesgo.
Mantener una buena salud durante toda la vida disminuirá el riesgo de tener cáncer y mejorará las probabilidades de sobrevivir si se enferma de cáncer. En el Sistema General de Seguridad Social en Salud las tecnologías para la detección temprana de este cáncer incluidas en el POS son: Examen clínico de mama: Se recomienda que las mujeres mayores de 20 años se realicen un examen clínico de la mama por lo menos cada tres años y que a partir de los 40 años, aumente la frecuencia del examen una vez al año. Este examen debe ser realizado por un profesional de la salud entrenado. Mamografía: cada dos años a toda mujer entre 50 y 69 años. ¡No olvidar el autoexamen de mama! El autoexamen de mama se convierte en una acción de autocuidado y protección cotidianas que ayuda a las mujeres a la detección temprana de cáncer. La mujer realiza palpación una vez al mes de sus propios senos buscando anomalías en su tamaño o forma. La realización regular de este autoexamen familiariza a la mujer con la consistencia usual de sus mamas y permitirá la identificación de nódulos o masas de forma más sencilla. Fuente del contenido:
División de Prevención y Control del Cáncer, Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Cáncer de mama, Ministerio de Salud y Protección Social.
Manual para la detección temprana del cáncer de mama. Ministerio de Salud y Protección Social Instituto Nacional de Cancerología ESE Bogotá - Colombia, 2015